Raruto #64c - "Final de Verdad"

¡Hola lectores! ¿Qué tal transcurre el lunes? ¿Monótono? Pues no sufras más, que aquí traigo la última parte del final de Raruto, y el final de la guerra. Si no le conoces, seguro te reirás, pero hay quienes no lograrán mantener las lágrimas, siendo el final. ¿Listo para las emociones? ¡Vamos a la entrada!

Primero, el capítulo. ¡Ahí va, disfrútalo!

[Presióname y entra al mundo de la nostalgia y la felicidad]

Ahora, mi advertencia spoilera: De ahora en adelante hablaré suponiendo que ya has leído el capítulo, de otro modo, te encontrarás con una avalancha de spoilers de la cual no podrás quejarte.

La Guerra

El Pedo Bestial fue cargado y enviado, condendando a toda la alianza ninja. Pero entonces, los Jefazos hacen su aparición, y Migato salva a todos al desviar el enorme poder con una raqueta. Sí, como si fuera poco más que un juego de tenis. Y hablando de Migato, su llegada al campo de batallo lo reúne con su hijo. La tensión incrementa, los recuerdos aflorecen, los sentimientos son derramados... Y Raruto le pide dinero, pero mucho.

Además de los Jefazos, Hamtaro y Coco llegan a la batalla, pero parten casi de inmediato al saber que Fubuki se encuentra en el desierto. Y, junto a ellos, llega Saske. Una vez más, el dolor es recordado, los momentos de felicidad corren, Raruto y Saske se han encontrado una vez más. Tal era la epicidad de ese reencuentro, que no hubo otra salida que un intento de asesinato por parte de Raruto, quien le exigía  a Saske devolver el dinero que le debía. Seré honesto, este reencuentro fue cien veces mejor que el del manga original, en más de un sentido.

Demasiado...

Coco y Hamtaro

Llegan al desierto, para encontrarse con un Fubuki moribundo. Gracias a las habilidades curativas de Hamtaro, logran salvarle, pero Fubuki les advierte que han de ir a por los Jefazos actuales, para curarles de la batalla con Majara.

Al llegar, encuentran un escenario de miedo. Los Jefazos fueron derrotados, ¡Y qué manera tan bestia de perder! Los Jefazos de Tierra y Rayo parecen estar en llamas, la Jefaza de Agua está aplastada por un árbol, y Rata... está partido en dos. ¿Ven? Tenía mis razones para preocuparme por él.

De nuevo, las habilidades de Hamtaro son demostradas, al unir a Rata en una sóla pieza y curar al resto de Jefazos. Ahora es su turno de ir a la guerra. Pero no con hambre, claro, primero pasarán al McNinja.

De vuelta a la Guerra

Majara tiene intención de luchar contra Cachorrama, como en los viejos tiempos. Éste se rehusa, pues prefiere jugar a la consola.

Por otro lado, Raruto tiene el plan perfecto para acabar con el Chubi, así que le arroja una piedra. Fuera de las expectativas de Saske, el Chubi comienza a desintegrarse. No, no ha muerto, sólo ha perdido su forma física, pues Majara planea implantar su energía en él mismo. A pocos metros de distancia, la bola está por tocarle y otorgale el poder de un dios. Justo antes de darle, Bobito nos recuerda que es un cabrón y se teletransporta justo frente la bola y la absorbe.

Y ahora, el jefe final ha sido mostrado.

Se respira el poder...

Posee Sharinflán, Rinneflán y Ratinflán. Además cocina flan. Aunque ahora tiene tanto poder, que no puede controlarlo, por tanto, se vuelve gordo. Esto le da a la alianza tiempo para atacar, aunque no lo logran utilizar a plenitud.

Bobito "quiere controlarlo", y lo logra. Ahora que domina todo ese poder, está imparable, y no hay nada que pueda hacerle daño. Raruto, que sabe que no hay otra salida, lanza una pokébola para invocar a Saponeitor, quien de un tiro fijo se carga a Bobito.

En lugar del poderoso Saponeitor, aparece Sapomurái, y Raruto lo declara un timo. En su ira, Sapomurái lanza su katana hacia Raruto, quien esquiva y permite que la katana le pegue a Bobito. Ese golpe sí le hizo daño, y lo deja ver con un "¡Au!". El segundo se da cuenta que sólo los ataques senjutsu le hacen daño, y aclara que es muy conveniente que sólo el protagonisto los conozca. Migato se arrepiente de cambiar los suyos por una caja de donuts.

El segundo luego le dice a Raruto que es vital que cambie a su Modo Sapo y le ataque, asegurando la victoria. Después de unas complicaciones, logran que el ataque llegue a Bobito y le dañan un poco. Mientras tanto, el final de Ninjas Adolescentes es transmitido, y las emociones corren mientras Daniel-chan está por salvar al mundo.

Después de mostrar su ira hacia el mundo actual, Bobito hace nacer la Planta Chupa-chakra. Cuando esta planta abra la boca y el ojo en su interior vea el sol, todo el mundo caerá en una ilusión que lo mantendrá bajo la voluntad de Bobito. Y además, mientras abre la boca, toma a todos los que estén a su alcance, succionando el chakra y, de paso, la vida. Sugiero unos momentos de silencio, por todos los ninjas de relleno que han muerto en este capítulo.

*silencio*

Desde la lejanía, los Jefazos actuales hacen su aparición, uniéndose a la guerra. La planta ya empieza a abrir la boca, y Cachorrama se dispone a subir la moral del ejército, a través de un discurso que alienta a todos a salvar ese absurdo mundo.

¡Pero alto! Antes de salvar el mundo exterior, hay una guerra de la cual nadie se ha enterado. Se trata de la batalla entre Cody la pulga y su padre, un dictador que impuso una época de maldad y tristeza para el mundo de las pulgas. Cody había ido a enfrentarse a su padre, después de su entrenamiento en el Monte Nalga, para derrotarle y liberar al mundo. Lo sé, estás confundido. Se trata de pulgas que viven en el cuerpo de Nino, y que han representado una historia secundaria desde hace ya rato. Hace ya rato...

Intensidad

De vuelta al mundo exterior, la planta está a pocos segundos manga de abrir la boca. Raruto intenta con un ataque en modo Saporro, pero no es suficiente para derrotarle. El segundo y el cuarto también intentan ataques normales, pero como ya deberían saber de sobra, no le hicieron nada.

Entonces, cuando estaba a punto de abrirse por completo, Bobito es víctima de la codicia y se distrae por unos segundos. Segundos suficientes que le dieron oportunidad a Raruto y Saske de hacer un ataque conjunto. Un ataque conjunto más épico que toda la guerra junta.

Chulo, chulo...

Aún así, no es suficiente para derrotarle (Ah...). Bobito se levanta de entre el humo y aprisiona a ambos con ramas. Parece que al final, los ninjas no pudieron contra el poder de Bobito. Hasta que sale Hamtaro y le ataca por la espalda. Pero, Bobito sigue siendo una especie de dios, y no muere. De hecho, regresa el golpe a Hamtaro, y ahora queda sólo medio segundo.

Un cuarto de segundo.

Una centésima de segundo...

Y Raruto revela su plan final. Hace rato, había llamado a un amigo (Con el cual he estado a la espera desde hace ya tiempo). ¿Quien era ese amigo? ¿Mr. Wong? ¿El tío del ramen? Nah, ROTULADOR.

Una leyenda entre los mortales

Rotulador parte la planta y, por ende, le arrebata todo poder a Bobito.

Pero antes de seguir, hay que regresar al Ninomundo, donde el destino de todo un mundo está siendo decidido por una batalla padre e hijo. Debido a que Nino fue rozado por la Planta Chupa-chakra, su chakra se ha vuelto inestable y el padre de Cody pierde su poder. Cody aprovecha y salta con un ataque que asegura la derrota de su padre y futuro más próspero y lleno de paz para todo el Ninomundo.

Bien, de vuelta a la guerra, Bobito y Majara se quejan de lo mal que está el mundo. Algo despierta en Cachorrama, quien tira un largo discurso, con una larga profundidad y sentimiento incomparable.

Sabiduría

Bobito muere, dándose cuenta del mal que ha hecho. Y si me preguntan, esta es una predicción muy acertada de lo que seguro pasa en la original. ¡Es que ahí nadie se salva de volverse bueno!

El Final de la Guerra

Después de una pelea de tal magnitud, Cachorrama se da cuenta que el mundo ninja necesita renacer (o al menos Torroja). Para ello, necesita un nuevo líder. Para decidir quién será el próximo Jefazo, toma el gorro de Jefazo de Kakasí y lo lanza, quien sea el afortunado en agarrarlo, será Jefazo. Eso sí, nadie puede moverse, o Cachorrama le matará. Ha lanzado el gorro...

Y Raruto salta a atraparlo.

Detrás de Guay se ve una fotocopia

Flora señala que no es válido, pues se movió. Raruto responde que no sólo eso, también ha puesto fotocopias en todo el lugar para atraparlo sí o sí. Es que nadie lo entiende, según dice Cachorrama, un ninja debe ser un cabrón, y nadie más cabrón que Raruto en toda la serie.

Waat?

Así como ves en la imagen de arriba, lo primero que Raruto hace es rechazar el puesto. Se lo ofrece a Saske, pues considera que será mejor para el puesto. Majara, al ver esto, sabe que está listo para morir. Se deja caer en el mundo muertil y...

¡Se veía venir, pero aún así te partes!

Todo un cabrón.

Y lo será por siempre... Es así como Raruto, un ninja gamberro y cabrón cumplió su sueño de volverse Jefazo y cobrar un sueldazo. Ha sido un largo camino, lleno de diversión y genjutsus, pero ya ha terminado... Voy a detenerme justo ahí, pronto vendré a hacer una entrada emotiva, pero no será en esta. Pronto, cuando encuentre y conecte todo lo que ha significado Raruto para mí personalmente todos estos años, haré una entrada digna del gigante que es, fue y será. Por ahora, me conformo con esta última página para recordarle. [Púnchame y llora, o grita, o entra en shock]

Y claro, he aquí la web oficial, en donde encontrarás todos los trabajos de Jesulink. [Presióname y parte tu cabeza con risa]

Y bien lectores, eso ha sido todo, por ahora. No olviden que pueden recomendarnos a través de sus redes sociales preferidas, y además seguirnos directamente con  los botones a la izquierda. También puedes enviarnos un mensaje directo a piruletavencida@hotmail.com o dejar un comentario justo aquí abajo. Que Sucellos os proteja con su gran martillo. ¡Hasta luego!

-Guille-